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Hace ya varias temporadas que este individuo nos está castigando con su sola presencia. No es necesario que abra su boca para que nos agobie ver su cara, por el recuerdo implícito de su pésimo quehacer como empresario, y por su desagradable semblante. ¿O no da revoltura ver esa imagen, ahí a la derecha?
Este individuo ha fundido todas las empresas que ha tocado: Aerolineas Argentinas, Air Comet, Viajes Marsans, etc... No contento con hundir sus empresas, se ha burlado de sus trabajadores: los ha hundido, humillado, maltratado e impagado.
¿Es posible que en un país serio, este individuo sea el Presidente de todos los empresarios? ¿Quiere ésto decir que todos los empresarios españoles son como el, ya que lo mantienen en la poltrona? ¿Nadie en ese colectivo tiene la vergüenza de echarle a la calle, por lo menos para salvar su culo? ¿Qué empresas le quedan por hundir para que se siga considerando empresario, o que otros lo consideren como tal?
La última receta que nos regala a los españoles es que hagamos lo contrario a lo que hace el, que por supuesto ya se cuida mucho de trabajar poco y mal y tener el dinero que les ha afanado a sus empleados, por la vía de la plusvalía, en el paraíso fiscal de turno. Trabajar más y cobrar menos, o sea, en román paladino, volver a la época preindustrial, o mejor, a la esclavitud, para que los trabajadores no tengan ni derecho a la protesta por semejantes propuestas, dignas de negreros, algo que este individuo practica desde hace muchos años.
Que nos dejen en paz a los pobres españoles estos individuos que solo valen para ofender. Que se vaya a jugar al golf, o a cualquiera de sus mansiones, compradas con el dinero que ha escatimado a los que han dependido de el, o a pasearse en yate... Que se vayan todos, pero todos... que no quede nadie, porque además de estar cada vez más depauperados, tenemos que seguir viéndoles, escuchándoles, soportándoles y sufragando sus gastos.