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Despues de estar pensando bastante sobre lo que acontece en España desde hace tres añitos, el resultado de la reflexión es algo descorazonador. Pero no lo es por lo que alguien pudiera pensar si lee estas humildes líneas.
Veamos: La labor del gobierno en esta legislatura ha sido más fecunda de lo que suele ser habitual, con la sanción de leyes absolutamente históricas para el conjunto de la sociedad española, nunca antes se había legislado pensando en los problemas de la mayoría del conjunto de la ciudadanía, a pesar de que aún quedan muchos problemas por resolver y que de verdad preocupan, como el tema de la vivienda o el final del terrorismo. Con el mantenimiento de la economía en un nivel que supera la media de los países de nuestro entorno. Con una creación de empleo desconocido durante décadas. Con un ejecutivo dialogante, con un Presidente del gobierno educado, honrado y digno que no se deja intimidar por mucha tormenta que caiga a su alrededor y que no cambia su discurso tranquilo a pesar de los rayos y centellas que tiene que soportar sobre su persona, que no es otra cosa que la representación de millones de españoles que le votaron.
La desazón viene al comprobar hasta que extremos puede llegar cierta clase política para recuperar el poder que creía en sus manos y que ya no tiene.
Estos políticos que España está padeciendo desde hace tres años en ningún momento han asumido el veredicto de las urnas, regla número uno del sistema democrático. Perdieron cuando creían que iban a ganar cómodamente y pretenden gobernar desde la bancada de la derecha. Han intendado marcar la agenda del gobierno desde el primer momento y no asumen que su agenda es éso, su agenda: la que lleva Rajoy (o quien manda en la sombra) y que la política se dirime en otros términos, desde el lugar diseñado para llevarla a cabo y con las maneras asumibles en cualquier país del primer mundo.
Desde hace tres años el insulto, la descalificación del adversario, la falta de respeto a todas las Instituciones del Estado, la negación a cualquier tipo de diálogo sea cual sea el tema que se proponga... ha llevado al Parlamento y al país a un nivel de crispación dificilmente respirable. La última vuelta de tuerca es el boicot a un medio de comunicación liderado por un grupo empresarial privado, porque tampoco admiten críticas a su proceder, es decir, o estás conmigo o contra mí.
La carencia de hábitos democráticos reflejada por estos políticos de la derecha, que les ha llevado al insulto y la descalificación permanente, lo que ha conseguido es precisamente descalificarles a ellos mismos para ejercer de nuevo el poder si llega el caso. ¿Quién se puede fiar de ellos ya? ¿Quién puede creer que van a ejercer la democracia, el respeto al contrario, la práctica de las libertades, la defensa de la libertad de expresión... si vuelven a estar en La Moncloa? Pues sencillamente, NADIE.
Y ahí llega la gran preocupación. Estos líderes descalificados, inhabilitados ya para gobernar... ¿tienen recambio? ¿Hay en la derecha española alguien capaz de dar tranquilidad a los ciudadanos para poder volver a votarles? ¿Existe un recambio a los Rajoy, Zaplana, Acebes y compañía, gentes que no han sabido perder unas elecciones y han llevado al país a un estado de división como yo no conocía y que se parece más a lo que estudiamos en los libros de bachiller sobre los prolegómenos de la guerra civil? ¿Hay alguien en las filas de la derecha que no dé miedo a los posibles votantes? ¿Alguien puede creer que despues de estos tres años de practicar una política de tierra quemada, de todo vale, pueden llegar a gobernar a TODOS los españoles sin cercenar cualquier tipo de crítica que no se amolde a lo que ellos piensan?
Ese es el gran problema que se presenta ahora en España. La derecha se ha equivocado gravemente y ha quemado a una generación de supuestos líderes. Bueno, lo que ellos creen líderes, porque personas que se han dedicado durante toda la legislatura actual al insulto y la descalificación del adversario, al insulto a las Instituciones que deberían estar por encima de las prácticas de la política cotidiana y como última medida, a intentar silenciar las críticas de los no afines por métodos propios de una dictadura... poco tienen de líderes.
La pregunta del millón es ¿Y AHORA QUÉ? ¿A quien van a presentar el año que viene? ¿A los mismos que agitan a la ciudadanía con mentiras completas o con medias verdades? ¿Quién les va a creer? ¿Alguien puede imaginar, desde la derecha democrática a la izquierda, que si ellos vuelven a gobernar van a empezar a respetar lo que se han dedicado a destrozar durante tres años, sin descanso? ¿No es cierto que todo el mundo teme, menos la estrema derecha de la que se han hecho portavoces, su manera de dirigir el país si vuelven a ganar unas elecciones?
El error ha sido tan grave que la preocupación actual es a quien puede presentar la derecha en el futuro para ganarse la confianza del electorado. Y es esa falta de liderazgo la que me tiene tan preocupada y seguramente a la mayor parte de los conservadores con inteligencia, que no saben a quien van a votar en el futuro.
Veamos: La labor del gobierno en esta legislatura ha sido más fecunda de lo que suele ser habitual, con la sanción de leyes absolutamente históricas para el conjunto de la sociedad española, nunca antes se había legislado pensando en los problemas de la mayoría del conjunto de la ciudadanía, a pesar de que aún quedan muchos problemas por resolver y que de verdad preocupan, como el tema de la vivienda o el final del terrorismo. Con el mantenimiento de la economía en un nivel que supera la media de los países de nuestro entorno. Con una creación de empleo desconocido durante décadas. Con un ejecutivo dialogante, con un Presidente del gobierno educado, honrado y digno que no se deja intimidar por mucha tormenta que caiga a su alrededor y que no cambia su discurso tranquilo a pesar de los rayos y centellas que tiene que soportar sobre su persona, que no es otra cosa que la representación de millones de españoles que le votaron.
La desazón viene al comprobar hasta que extremos puede llegar cierta clase política para recuperar el poder que creía en sus manos y que ya no tiene.
Estos políticos que España está padeciendo desde hace tres años en ningún momento han asumido el veredicto de las urnas, regla número uno del sistema democrático. Perdieron cuando creían que iban a ganar cómodamente y pretenden gobernar desde la bancada de la derecha. Han intendado marcar la agenda del gobierno desde el primer momento y no asumen que su agenda es éso, su agenda: la que lleva Rajoy (o quien manda en la sombra) y que la política se dirime en otros términos, desde el lugar diseñado para llevarla a cabo y con las maneras asumibles en cualquier país del primer mundo.
Desde hace tres años el insulto, la descalificación del adversario, la falta de respeto a todas las Instituciones del Estado, la negación a cualquier tipo de diálogo sea cual sea el tema que se proponga... ha llevado al Parlamento y al país a un nivel de crispación dificilmente respirable. La última vuelta de tuerca es el boicot a un medio de comunicación liderado por un grupo empresarial privado, porque tampoco admiten críticas a su proceder, es decir, o estás conmigo o contra mí.
La carencia de hábitos democráticos reflejada por estos políticos de la derecha, que les ha llevado al insulto y la descalificación permanente, lo que ha conseguido es precisamente descalificarles a ellos mismos para ejercer de nuevo el poder si llega el caso. ¿Quién se puede fiar de ellos ya? ¿Quién puede creer que van a ejercer la democracia, el respeto al contrario, la práctica de las libertades, la defensa de la libertad de expresión... si vuelven a estar en La Moncloa? Pues sencillamente, NADIE.
Y ahí llega la gran preocupación. Estos líderes descalificados, inhabilitados ya para gobernar... ¿tienen recambio? ¿Hay en la derecha española alguien capaz de dar tranquilidad a los ciudadanos para poder volver a votarles? ¿Existe un recambio a los Rajoy, Zaplana, Acebes y compañía, gentes que no han sabido perder unas elecciones y han llevado al país a un estado de división como yo no conocía y que se parece más a lo que estudiamos en los libros de bachiller sobre los prolegómenos de la guerra civil? ¿Hay alguien en las filas de la derecha que no dé miedo a los posibles votantes? ¿Alguien puede creer que despues de estos tres años de practicar una política de tierra quemada, de todo vale, pueden llegar a gobernar a TODOS los españoles sin cercenar cualquier tipo de crítica que no se amolde a lo que ellos piensan?
Ese es el gran problema que se presenta ahora en España. La derecha se ha equivocado gravemente y ha quemado a una generación de supuestos líderes. Bueno, lo que ellos creen líderes, porque personas que se han dedicado durante toda la legislatura actual al insulto y la descalificación del adversario, al insulto a las Instituciones que deberían estar por encima de las prácticas de la política cotidiana y como última medida, a intentar silenciar las críticas de los no afines por métodos propios de una dictadura... poco tienen de líderes.
La pregunta del millón es ¿Y AHORA QUÉ? ¿A quien van a presentar el año que viene? ¿A los mismos que agitan a la ciudadanía con mentiras completas o con medias verdades? ¿Quién les va a creer? ¿Alguien puede imaginar, desde la derecha democrática a la izquierda, que si ellos vuelven a gobernar van a empezar a respetar lo que se han dedicado a destrozar durante tres años, sin descanso? ¿No es cierto que todo el mundo teme, menos la estrema derecha de la que se han hecho portavoces, su manera de dirigir el país si vuelven a ganar unas elecciones?
El error ha sido tan grave que la preocupación actual es a quien puede presentar la derecha en el futuro para ganarse la confianza del electorado. Y es esa falta de liderazgo la que me tiene tan preocupada y seguramente a la mayor parte de los conservadores con inteligencia, que no saben a quien van a votar en el futuro.
Política
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11 comentarios:
El gran problema de este país es que mientras la izquierda intenta hacer políticas sociales, todo lo positivo de esto es eclipsado por una derecha que ni se encuentra a sí misma ni sabe dónde está.
Y mientras en un país exista un partido que pierda las elecciones sin asumirlo ni querer asumirlo, no podremos hablar de democracia ni de libertad.
Lo peor de todo ello es que éstos mismos que dicen defender la libertad y la democracia a ultranza son precisamente los que no asumen sus resultados cuando le son adversos.
Veremos qué pasa en las elecciones de Mayo respecto a esta actitud de la derecha que actualmente tenemos en nuestro país y respecto a esa posición suya de alejarse de las posturas más moderadas dentro de su ideología...
Depende de lo que pase, se volverán a cambiar la careta o no, como acostumbran a hacer, y aquí paz y después gloria.
El problema, el verdadero problema, es que si realmente la derecha ha llegado a un punto de no retorno, de radicalización extrema... es perfectamente posible que ganen unas elecciones. La política electoral no es una ciencia exacta, no se basa en supuestos básicos que siempre se deben cumplir. Hay precedentes, sumamente preocupantes, y no por ello quiero crear símiles ideológicos, pero en la República de Weimar un señor llamado Adolf Hitler salió elegido canciller por la fuerza de los votos. Lo que significa, que no siempre el electorado se atiene a razones, sino muchas veces a fobias, filias y pasiones viscerales. La derecha se ha radicalizado, sí. ¿Eso le impide ganar unas elecciones? No, claro que no: por tanto lo realmente preocupante no es que los conservadores de España no tengan a quien votar, sino que acaben votando a lo único que tienen.
Pues sí, Mr. Hyde... esa es la otra parte del problema porque cada día que pasa, escuchando el discurso de la derecha... y lo que nos queda de aquí a las elecciones de mayo...
No tengo ninguna confianza en la movilización de la izquierda, así como me consta que la derecha va a votar en bloque, por lo que puede estar bastante reñido el resultado.
También pienso en el año que nos queda hasta las generales, que va a ser mucho más de lo mismo y qué quieres que te diga, no sé si emigrar...
Cada vez que sale Acebes, por ejemplo hoy, acusando al gobierno de "crispar"... ¿qué te parece? Cada cosa que hacen, inmediatamente la rebotan hacia el contrario, con una dosis de cinismo dificilmente soportable. Pero desde este lado, uno tiene la sensación de que estamos maniatados por esos discursos, que no hay reacción.
Lamentable.
Efectivamente, la política no es una cincia exacta. Y sí, es posible que gane las elecciones (Se me abren las carnes). Realmente es una vergüenza que a estas fechas todavía no asuman que perdieron las elecciones. No os dáis cuenta? no lo pueden asumir porque eso es reconocer sus errores, la mentira tremenda del 11M, CONSECUENCIA DE LA GUERRA DE IRAK. Hay que seguir haciendo ruido, para que no se observe al Gobierno, para que no nos demos cuenta de como va la legislatura. Que políticos tenemos de cara a futuro en la derecha?. No es tremendo pensar que el "trio de la bencina" pueda gobernar?. Las próximas Municipalesy Autonómica no se si serán un referente, pero salgan como salgan ya vereís como se van a redoblar los truenos y venablos. Penita ....
Creo que lo que sucede, basicamente, es que el PP tiene tan asumido que el PSOE utilizó el terrorismo islámico para encaramarse al poder, que ellos ahora creen su deber moral (y el problema no es que haya políticos inmorales, es que no admiten que la política es todo lo contrario que la ética y la moralidad) vengarse utilizando, a su vez, el terrorismo etarra.
Si no fuera por el tremendismo que nos asola, sería para reir. Llegan a la sesión del congreso con el cuaderno de ruta para el día, que el tiempo que han tardado en aprendérselo no les ha dejado escuchar al ministro del ramo. Vease partido batasunero que no ha colado, vease detenciones de etarras (creo que ya eran 8). ¿Poco ágiles? ¿o vemos claramente que dá igual lo que ocurra?.
Pues si, lo lamentable es que siempre se habla de lo mismo desde hace muuuuucho tiempo. Da lo mismo que se tramiten y sanciones leyes, que se detenga a terroristas, que la vida siga adelante.
A ellos no les importa más que no se hable de lo que les puede hacer daño: el juicio del 11-M.
De eso deberíamos estar hablando todos en todo momento, y se destaparían sus vergüenzas, que son muchas y muy grosas. Pero ay, amiguinos, eso no les interesa.
Y ya va siendo hora de decir ¡¡BASTA!!
¡Que somos mayoría, a ver si nos enteramos!
Estoy muy de acuerdo con vuestros análisis. Yo lo que me pregunto es cómo es posible que aún mantengan ese apoyo electoral que dicen las encuestas y con el que no podemos descartar que en el 2008 ganen.
Porque hay mucho votante, demasiados, que votan al PP porque son los suyos, haga el líder lo que haga. Una persona muy cercana a mí, derechista, está muy en desacuerdo con la línea de Acebes y Zaplana, tiene aún esperanzas de que Zapatero logre el fin de ETA, cree que Rajoy se está equivocando, y está escandalizado con la conspiranoia. Pues bien, con todo esto, no tiene la más mínima duda de que va a votar al PP en el 2008, porque aunque él no lo crea una parte de las insidias y acusaciones absurdas a Zapatero han calado dentro de él.
Blanca, encantado de conocer tu blog. Sintonizo plenamente contigo y voy a incluir un enlace a este sitio desde mi propio blog.
Un saludo
El gobierno se dirige a la razón de los ciudadanos. La oposición a los instintos. La oposición tiene todas las cartas para ganar.